En el capítulo cuatro, versículo 12 del libro de Timoteo encontramos uno de los pasajes más predicables y —por lo tanto— más predicados. No me sorprendería saber que cada semana hay cientos o quizá miles de púlpitos desde donde se predica una versión de este texto:

Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.

Si tú, querido lector,has asistido como yo durante algunos años a la iglesia, estarás de acuerdo en que existen dos constantes en la manera en la que se expone este versículo. Primero que nada, siempre va dirigido a los jóvenes donde con “jóvenes” en realidad queremos decir “adolescentes” porque a los jovenes adultos no los toma en cuenta nunca nadie.

La segunda constante es la tendencia a tomar el versículo como un bosquejo completo que contiene una introducción, un giro inesperado y termina con una lista de instrucciones morales. Cuando se mira de ese modo, y una vez destilados los elementos, el sermón practicamente se escribe solo:

Joven, sabemos que no te gusta que te tengan en poco, que no te tomen en cuenta, que te critiquen o que te menosprecien. Pero hoy te traemos la solución: aquí la Biblia dice que la razón por la que esto te sucede es completamente por tu culpa. Lo que pasa, joven, es que no estás siendo ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.

Esta última parte es el sueño de todo predicador: una lista de términos para definir. Así que es muy probable que la persona que está predicando o enseñando se disponga a definir qué significa ser ejemplo en todos estos aspectos¹. Cómo ser ejemplo en palabra, como ser ejemplo en conducta… etc. Finalmente, terminando con una invitación a todo los jóvenes a esforzarse para vivir una vida ejemplar para que entonces --y solo entonces–, se les deje al fin de tener en poco.

Contexto, por favor §

El problema aquí es que como tu seguramente sabes, la Biblia no fue escrita con capitulos y versículos², sino que los autores de la Biblia escribieron cartas, libros y volumenes que fueron diseñadas para ser consumidas como obras completas. Los autores no anticiparon que nosotros tomaríamos ciertas frases porque nos gustan como suenan y las usaramos fuera de contexto.

Los que predicamos tenemos que tener mucho cuidado de hacer correctamente lo que se llama “éxegesis”, es decir: interpretar la biblia correctamente de acuerdo a su contexto inmediato, histórico, cultural y teológico. De lo contrario, cuando no hacemos esto, podemos caer en el error de buscar en la biblia frases que nos gustan y acomodarlas a nuestro gusto para reforzar o incluso para forzar nuestra propia opinión y hacerla parecer como si fuera bíblica.

Pero que pasa si ponemos esta porción de vuelta donde corresponde, en su contexto oiriginal y respondemos tres preguntas importantes: ¿Quién escribió este texto tan popular?, ¿a quién se lo escribió? y ¿con qué propósito?

¿Quién escribió este texto? §

Este famoso texto lo encontramos en lo que conocemos como La Primera Epístola a Timoteo, cuyo autor, de acuerdo al texto mismo, es el apostol Pablo³.

Pablo, apóstol de Jesucristo por mandato de Dios nuestro Salvador, y del Señor Jesucristo nuestra esperanza, a Timoteo, verdadero hijo en la fe: Gracia, misericordia y paz, de Dios nuestro Padre y de Cristo Jesús nuestro Señor. —1 Timoteo 1:1-2

¿A quién fue escrito? §

Como vimos arriba, y como el nombre de a carta lo dice, este famoso texto fue dirigido a Timoteo, quien era el discípulo más cercano de Pablo. Sus cartas nos dejan ver que Pablo quería a Timoteo tanto como si fuera un hijo adoptivo. Lo había conocido en la ciudad de Listra⁴ en uno de sus viajes misioneros y quedó tan impresionado por su testimonio (y el testimonio que otros daban de él) que inmediatamente lo invitó a trabajar con él.

La madre de Timoteo era una mujer judía quién, ayudado por su abuela, lo había educado desde muy pequeño en las escrituras hebreas. Su padre, por otra parte, era de origen griego y podemos intuír que no estaba ni remotamente interesado en el judaísmo de su esposa debido al hecho e que el pequeño Timoteo tuvo un nombre griego en vez de uno judío y que jamás se fue circuncidado como su religión lo requería.

¿Con qué propósito fue escrito? §

Cuando Pablo escuchó que la iglesia que había fundado en la ciudad de Éfeso estaba atravesando por problemas muy serios, decidió que alguien tendría que viajar hasta allá y trabajar en corregir dichos problemas. Ésta persona tendría que llevar a cabo una total reorganización de la iglesia, comenzando por expulsar a dos maestros quienes a pesar de ser muy populares, estaban enseñando doctrinas incorrectas y dañinas. Después debería corregir el daño causado por éstos mediante la enseñanza correcta del evangelio; tendría que reestablecer el orden en la iglesia y subsanar relaciones dañadas. Finalmente, debería reemplazar una gran parte del liderazgo con personas de buen testimonio.

¿A quién eligio Pablo para esta Tarea? A Timoteo, su hijo espiritual, en quién depositó toda su confianza, autoridad y reputación.

El apostol comisionó entonces a Timoteo para viajar hasta Éfeso para que tomara control del liderazgo en su lugar y reparar la cultura de la iglesia. Y debía hacer todo esto, mientras que muchos en la iglesia de Éfeso lo menospreciaban por su genealogía, cuestionaban su preparación teológica e intelectual y lo avergonzaban porque desde su punto de vista era demasiado joven e inexperto ⁵.

¿Te imaginas la cantidad de estrés bajo el que se encontraba el pobre de Timoteo? La carta nos dice que tenía una gastritis tan terrible que hasta el agua le caía mal ⁶.

Finalmente, la respuesta a nuestra pregunta es que el apostol Pablo le escribió a Timoteo principalmente para animarlo y para recordarle que cuenta con todo su apoyo y con toda su confianza, y que además está convencido de que el llamado de Timoteo está respaldado por Dios.

El ejemplo de Timoteo §

Habiendo recuperado el contexto de nuestro versículo, podemos ver que hay un problema para aquella aplicación tradicional de 1 Timoteo 4:12 de la que hablabamos, donde le decimos a los jóvenes que deben ser ejemplo para evitar ser tenidos en poco.

El problema radica en que simplemente no existe manera de que Pablo esté diciéndole a Timoteo que la razón por la que está sufriendo desprecio es por su propia culpa, por que de alguna manera está quedándose corto en su testimonio cristiano. Eso no solo es cruel y tonto, además es exegéticamente y teológicamente incorrecto. Timoteo es un creyente ejemplar y esa es la razón principal por la que fue puesto en la posición en la que se encuentra.

Culturas tóxicas §

El pasado Octubre del 2021, la Iglesia del Nazareno llevó a cabo un webinar abordando mitos sobre enfermedades mentales desde una perspectiva teologica (nazarena y wesleyana) además de científica. Durante dicho webinar, la doctora Janet Dean compartió esta frase de la autora Amy Simpson que se quedará grabada para siempre en mi mente:

Si alguien te está diciendo que tu sufrimiento terminaría si tan sólo fueras un mejor cristiano. Ese mensaje no viene de Dios.

Con eso en mente, podemos concluir que el problema aquí no es Timoteo. El problema radica más bien en que la iglesia de Éfeso ha desarrollado una cultura tan tóxica y tan hostil que menosprecia y discrimina basada en criterios arbitrarios.

Pablo lo sabe. Es por eso que entre todas la lista de instrucciones que Timoteo tiene que llevar a cabo va incluída la de prohibir que se le tenga en poco. La NVI lo deja más claro:

Encarga y enseña estas cosas. Que nadie te menosprecie por ser joven. — 1 Timoteo 4:11-12a

Qué pasaría si en vez que predicar esta porción bíblica dirigiéndonos a lo jóvenes para decirles cómo hacer para que no los menosprecien, en su lugar le habláramos al resto y enseñaramos como hacer para no ser Éfeso: una iglesia que peca teniendo en poco a su juventud.